Apple continua en una intensa búsqueda por controlar al máximo la experiencia de usuario de sus productos. A tal fin, ha presentado una patente conocida con el nombre de “tarjeta SIM virtual” que permitiría su total desvinculación con el mercado de los operadores móviles en el terreno de la distribución de dispositivos. Tan sencillo como comprar un iPhone o un iPad y que sean los propios dispositivos los que, al encenderse por vez primera, nos permitan elegir qué operador vamos a utilizar como proveedor de servicios de voz y/o datos.
Cierto es que el cambio en este tratamiento que Apple otorgaría a las compañías operadoras las convertiría en mero “conducto” a la hora de exprimir determinadas funciones en sus dispositivos, llevando incluso a dichas compañías a tener que mejorar considerablemente sus únicos argumentos de venta: servicios y precio.
En primera instancia, podríamos pensar que es el cliente final el mayor beneficiado. Aunque en algunas ocasiones seamos nosotros mismos los que nos tratamos de beneficiar de algunas condiciones impuestas por algunos de los operadores con el fin de conseguir determinados terminales cuyo coste libre serían excesivamente elevados.
Por otro lado, ya en un terreno mucho más técnico, la opción de una tarjeta SIM virtual nos permitiría llevar en nuestros bolsillos dispositivos más delgados. A la vista está el primer intento de estandarizar las tarjetas microSIM con el iPhone 4 de manos de Jonny Ive, Vicepresidente Senior de Diseño Industrial de Apple.
Tras el teléfono sin tarjeta SIM, es evidente que el hecho de que Apple haya patentado esta idea, no implica que necesariamente ésta sea llevada a cabo, sino que es una parte más de su propiedad intelectual a permanecer a buen recaudo. No obstante, tras revolucionar la industria musical, no sería de extrañar que en Cupertino estuvieran pensando en hacer pasar a las operadoras por el aro… si es que ya no lo han conseguido.
0 comentarios:
Publicar un comentario