¿Qué ha pasado con Kodak? Su logotipo todavía está en la entrada de muchas tiendas de fotografía. Claro que muchas de ellas están cerradas y el logo ha adquirido un aspecto algo desvaído y decadente. Exactamente lo mismo que le ha pasado a la compañía que tras 130 años de existencia y éxito, se enfrenta ahora a su etapa más difícil. Tan difícil que podría acabar con ella.
Las búsquedas de culpables suelen desembocar en dos hallazgos: por un lado, la fotografía digital, mundo en el que, si bien Kodak intentó adaptarse, nunca logró los resultados de sus oponentes. El otro culpable tiene nombre propio: Antonio Perez, CEO de la compañía desde 2005, que ha logrado unas cifras con las que se ha ganado un lugar en listas de “los peores CEOs de 2011″.
Se trata de cifras bastante impresionantes: desde que Perez tomó el mando, Kodak ha caído un 96% en bolsa, y la única estrategia propuesta por el CEO parece consistir en demandar a todas las compañías rivales (Apple y RIM incluidas) que hayan infringido alguna de sus patentes. Entre esta curiosa estrategia de negocio y la dependencia de Kodak del crédito, los accionistas no están nada contentos.
De hecho, todos sus temores se confirmaron a finales de 2011, cuando Kodak admitió que no tenía suficiente financiación como para continuar su negocio. La compañía confiaba en poder vender su cartera de patentes para lograr más fondos, y otros activos, como su unidad Kodak Gallery, para la que buscan compradores.
Mientras, desde dentro parece que las cosas no pintan mucho mejor, y desde hace varios meses Kodak está viendo cómo sus ejecutivos van abandonando la empresa ante la sombra de la desaparición. Antonio Perez, mientras, intenta asesorarse contratando y despidiendo a distintas firmas de asesoramiento de negocio. Quizá cuando se decida por una, ya sea demasiado tarde.
0 comentarios:
Publicar un comentario